Y Zacarías su padre fue lleno del Espíritu Santo, y profetizó
Lucas
1:67- 70 Y Zacarías
su padre fue lleno del Espíritu Santo, y profetizó, diciendo: Bendito el Señor
Dios de Israel, Que ha visitado y redimido a su pueblo, Y nos levantó un
poderoso Salvador En la casa de David su
siervo, Como habló por boca de sus santos profetas que fueron desde el
principio;
Y tú, niño, profeta del Altísimo serás llamado
Lucas
1:76- 79 Y tú, niño,
profeta del Altísimo serás llamado; Porque irás delante de la presencia del
Señor, para preparar sus caminos; Para dar conocimiento de salvación a su
pueblo, Para perdón de sus pecados, Por
la entrañable misericordia de nuestro Dios, Con que nos visitó desde lo alto la
aurora, Para dar luz a los que habitan en tinieblas y en sombra de muerte; Para encaminar nuestros pies por camino de
paz.
Estaba también allí Ana, profetisa, hija de Fanuel
Lucas
2:36- 38 Estaba
también allí Ana, profetisa, hija de Fanuel, de la tribu de Aser, de edad muy
avanzada, pues había vivido con su marido siete años desde su virginidad, y era
viuda hacía ochenta y cuatro años; y no se apartaba del templo, sirviendo de
noche y de día con ayunos y oraciones. Esta, presentándose en la misma hora,
daba gracias a Dios, y hablaba del niño a todos los que esperaban la redención
en Jerusalén.
De cierto os digo, que ningún profeta es acepto en su propia tierra
Lucas
4:23- 30 Él les dijo:
Sin duda me diréis este refrán: Médico, cúrate a ti mismo; de tantas cosas que
hemos oído que se han hecho en Capernaum, haz también aquí en tu tierra. Y añadió: De cierto os digo, que ningún
profeta es acepto en su propia tierra. Y en verdad os digo que muchas viudas
había en Israel en los días de Elías, cuando el cielo fue cerrado por tres años
y seis meses, y hubo una gran hambre en toda la tierra; pero a ninguna de ellas fue enviado Elías,
sino a una mujer viuda en Sarepta de Sidón. Y muchos leprosos había en Israel
en tiempo del profeta Eliseo; pero ninguno de ellos fue limpiado, sino Naamán
el sirio.Al oír estas cosas, todos en la sinagoga se llenaron de ira; y levantándose, le echaron fuera de la ciudad,
y le llevaron hasta la cumbre del monte sobre el cual estaba edificada la
ciudad de ellos, para despeñarle. Mas él
pasó por en medio de ellos, y se fue.
Gozaos en aquel día, y alegraos, porque he aquí vuestro galardón es grande
en los cielos; porque así hacían sus padres con los profetas. Mas !ay de vosotros, ricos! porque ya tenéis
vuestro consuelo.
Lucas
6:22- 26
Bienaventurados seréis cuando los hombres os aborrezcan, y cuando os
aparten de sí, y os vituperen, y desechen vuestro nombre como malo, por causa
del Hijo del Hombre. Gozaos en aquel día, y alegraos, porque he aquí vuestro
galardón es grande en los cielos; porque así hacían sus padres con los
profetas. Mas !ay de
vosotros, ricos! porque ya tenéis vuestro consuelo. !Ay de vosotros, los que
ahora estáis saciados! porque tendréis hambre. !Ay de vosotros, los que ahora
reís! porque lamentaréis y lloraréis. !Ay de vosotros, cuando todos los hombres
hablen bien de vosotros! porque así hacían sus padres con los falsos profetas.
Y todos tuvieron miedo, y glorificaban a Dios, diciendo: Un gran
profeta se ha levantado entre nosotros; y: Dios ha visitado a su pueblo
Lucas
7:12- 17 Cuando llegó
cerca de la puerta de la ciudad, he aquí que llevaban a enterrar a un difunto,
hijo único de su madre, la cual era viuda; y había con ella mucha gente de la
ciudad. Y cuando el Señor la vio, se
compadeció de ella, y le dijo: No llores. Y acercándose, tocó el féretro; y los que lo
llevaban se detuvieron. Y dijo: Joven, a ti te digo, levántate. Entonces se
incorporó el que había muerto, y comenzó a hablar. Y lo dio a su madre. Y todos
tuvieron miedo, y glorificaban a Dios, diciendo: Un gran profeta se ha
levantado entre nosotros; y: Dios ha visitado a su pueblo. Y se extendió la
fama de él por toda Judea, y por toda la región de alrededor.
Os digo que entre los nacidos de mujeres, no hay mayor profeta que
Juan el Bautista
Lucas
7:24- 30 Cuando se
fueron los mensajeros de Juan, comenzó a decir de Juan a la gente: ¿Qué
salisteis a ver al desierto? ¿Una caña sacudida por el viento? Mas ¿qué
salisteis a ver? ¿A un hombre cubierto de vestiduras delicadas? He aquí, los
que tienen vestidura preciosa y viven en deleites, en los palacios de los reyes
están. Mas ¿qué salisteis a ver? ¿A un profeta? Sí, os digo, y más que profeta.
Este es de quien está escrito: He aquí, envío mi mensajero delante de tu faz, El cual preparará tu camino delante de ti. Os
digo que entre los nacidos de mujeres, no hay mayor profeta que Juan el
Bautista; pero el más pequeño en el reino de Dios es mayor que él. Y todo el
pueblo y los publicanos, cuando lo oyeron, justificaron a Dios, bautizándose
con el bautismo de Juan. Mas los fariseos y los intérpretes de la ley
desecharon los designios de Dios respecto de sí mismos, no siendo bautizados
por Juan.
Sí: Este, si fuera profeta, conocería quién y qué clase de mujer es
la que le toca
Lucas
7:36- 50 Uno de los
fariseos rogó a Jesús que comiese con él. Y habiendo entrado en casa del
fariseo, se sentó a la mesa. Entonces
una mujer de la ciudad, que era pecadora, al saber que Jesús estaba a la mesa
en casa del fariseo, trajo un frasco de alabastro con perfume; y estando detrás de él a sus pies, llorando,
comenzó a regar con lágrimas sus pies, y los enjugaba con sus cabellos; y
besaba sus pies, y los ungía con el perfume. Cuando vio esto el fariseo que le
había convidado, dijo para sí: Este, si fuera profeta, conocería quién y qué
clase de mujer es la que le toca, que es pecadora. Entonces respondiendo Jesús, le dijo: Simón,
una cosa tengo que decirte. Y él le dijo: Di, Maestro. Un acreedor tenía dos
deudores: el uno le debía quinientos denarios, y el otro cincuenta; y no teniendo ellos con qué pagar, perdonó a
ambos. Di, pues, ¿cuál de ellos le amará más? Respondiendo Simón, dijo: Pienso que aquel a
quien perdonó más. Y él le dijo: Rectamente has juzgado. Y vuelto a la mujer,
dijo a Simón: ¿Ves esta mujer? Entré en tu casa, y no me diste agua para mis
pies; mas ésta ha regado mis pies con lágrimas, y los ha enjugado con sus
cabellos. No me diste beso; mas ésta, desde que entré, no ha cesado de besar
mis pies. No ungiste mi cabeza con
aceite; mas ésta ha ungido con perfume mis pies. Por lo cual te digo que sus
muchos pecados le son perdonados, porque amó mucho; mas aquel a quien se le
perdona poco, poco ama. Y a ella le dijo: Tus pecados te son perdonados. Y los
que estaban juntamente sentados a la mesa, comenzaron a decir entre sí: ¿Quién
es éste, que también perdona pecados? Pero él dijo a la mujer: Tu fe te ha
salvado, ve en paz.
Juan ha resucitado de los muertos; otros: Elías ha aparecido; y
otros: Algún profeta de los antiguos ha resucitado
Lucas
9:7- 9 Herodes el
tetrarca oyó de todas las cosas que hacía Jesús; y estaba perplejo, porque
decían algunos: Juan ha resucitado de los muertos; otros: Elías ha aparecido; y
otros: Algún profeta de los antiguos ha resucitado. Y dijo Herodes:
A Juan yo le hice decapitar; ¿quién, pues, es éste, de quien oigo tales cosas?
Y procuraba verle.
Edificáis los sepulcros de
los profetas a quienes mataron vuestros padres! De modo que sois testigos y consentidores de
los hechos de vuestros padres
Lucas
11:47- 51 !Ay de vosotros, que edificáis los sepulcros
de los profetas a quienes mataron vuestros padres! De modo que sois testigos y consentidores de
los hechos de vuestros padres; porque a la verdad ellos los mataron, y vosotros
edificáis sus sepulcros. Por eso la
sabiduría de Dios también dijo: Les enviaré profetas y apóstoles; y de ellos, a
unos matarán y a otros perseguirán, para que se demande de esta generación la
sangre de todos los profetas que se ha derramado desde la fundación del mundo, desde
la sangre de Abel hasta la sangre de Zacarías, que murió entre el altar y el
templo; sí, os digo que será demandada de esta generación.
Jerusalén, que matas a los profetas, y apedreas a los que te son
enviados
Lucas
13:33- 35 Sin embargo,
es necesario que hoy y mañana y pasado mañana siga mi camino; porque no es
posible que un profeta muera fuera de Jerusalén. !Jerusalén, Jerusalén, que
matas a los profetas, y apedreas a los que te son enviados! !Cuántas veces
quise juntar a tus hijos, como la gallina a sus polluelos debajo de sus alas, y
no quisiste! He aquí, vuestra casa os
es dejada desierta; y os digo que no me veréis, hasta que llegue el tiempo en
que digáis: Bendito el que viene en nombre del Señor.
No podéis servir a Dios y a las riquezas. Y oían también
todas estas cosas los fariseos, que eran avaros, y se burlaban de él. Entonces les dijo: Vosotros sois los que os
justificáis a vosotros mismos delante de los hombres; mas Dios conoce vuestros
corazones; porque lo que los hombres tienen por sublime, delante de Dios es
abominación. La ley y los profetas eran hasta Juan
Lucas
16:13- 17 Ningún
siervo puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro,
o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las
riquezas. Y oían también todas estas cosas los fariseos, que eran
avaros, y se burlaban de él. Entonces
les dijo: Vosotros sois los que os justificáis a vosotros mismos delante de los
hombres; mas Dios conoce vuestros corazones; porque lo que los hombres tienen
por sublime, delante de Dios es abominación. La ley y los profetas eran hasta
Juan; desde entonces el reino de Dios es anunciado, y todos se esfuerzan por
entrar en él. Pero más fácil es que pasen el cielo y la tierra, que se frustre
una tilde de la ley.
Y ellos le dijeron: De Jesús nazareno, que fue varón profeta,
poderoso en obra y en palabra delante de Dios y de todo el pueblo
Lucas
24:15- 20 Sucedió que
mientras hablaban y discutían entre sí, Jesús mismo se acercó, y caminaba con
ellos. Mas los ojos de ellos estaban velados, para que no le conociesen. Y les
dijo: ¿Qué pláticas son estas que tenéis entre vosotros mientras camináis, y
por qué estáis tristes? Respondiendo uno de ellos, que se llamaba Cleofas, le
dijo: ¿Eres tú el único forastero en Jerusalén que no has sabido las cosas que
en ella han acontecido en estos días? Entonces él les dijo: ¿Qué cosas? Y ellos
le dijeron: De Jesús nazareno, que fue varón profeta, poderoso en obra y en
palabra delante de Dios y de todo el pueblo; y cómo le entregaron los principales
sacerdotes y nuestros gobernantes a sentencia de muerte, y le crucificaron.
Tardos de corazón para creer
todo lo que los profetas han dicho
Lucas
24:25 Entonces él
les dijo: !Oh insensatos, y tardos de corazón para creer todo lo que los
profetas han dicho! ¿No era necesario
que el Cristo padeciera estas cosas, y que entrara en su gloria? Y comenzando desde Moisés, y siguiendo por
todos los profetas, les declaraba en todas las Escrituras lo que de él decían.
¿Eres tú el profeta? Y respondió: No
Juan
1:19- 25 Este es el
testimonio de Juan, cuando los judíos enviaron de Jerusalén sacerdotes y
levitas para que le preguntasen: ¿Tú, quién eres? Confesó, y no negó, sino
confesó: Yo no soy el Cristo. Y le preguntaron:
¿Qué pues? ¿Eres tú Elías? Dijo: No soy. ¿Eres tú el profeta? Y respondió: No.
Le dijeron: ¿Pues quién eres? para que demos respuesta a los que nos enviaron.
¿Qué dices de ti mismo? Dijo: Yo soy la
voz de uno que clama en el desierto: Enderezad el camino del Señor, como dijo
el profeta Isaías. Y los que habían sido
enviados eran de los fariseos. Y le
preguntaron, y le dijeron: ¿Por qué, pues, bautizas, si tú no eres el Cristo,
ni Elías, ni el profeta?
Le dijo la mujer: Señor, me parece que tú eres profeta
Juan
4:19- 24 Le dijo la
mujer: Señor, me parece que tú eres profeta. Nuestros padres adoraron en este
monte, y vosotros decís que en Jerusalén es el lugar donde se debe adorar. Jesús le dijo: Mujer, créeme, que la hora
viene cuando ni en este monte ni en Jerusalén adoraréis al Padre. Vosotros
adoráis lo que no sabéis; nosotros adoramos lo que sabemos; porque la salvación
viene de los judíos. Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos
adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre
tales adoradores busca que le adoren. Dios es Espíritu; y los que le adoran, en
espíritu y en verdad es necesario que adoren.
Aquellos hombres entonces, viendo la señal que Jesús había hecho,
dijeron: Este verdaderamente es el profeta que había de venir al mundo
Juan
6:14, 15 Aquellos
hombres entonces, viendo la señal que Jesús había hecho, dijeron: Este
verdaderamente es el profeta que había de venir al mundo. Pero entendiendo
Jesús que iban a venir para apoderarse de él y hacerle rey, volvió a retirarse
al monte él solo.
Entonces algunos de la multitud, oyendo estas palabras, decían:
Verdaderamente éste es el profeta
Juan
7:40- 47 Entonces
algunos de la multitud, oyendo estas palabras, decían: Verdaderamente éste es
el profeta. Otros decían: Este es el Cristo. Pero algunos decían: ¿De Galilea
ha de venir el Cristo? ¿No dice la Escritura que del linaje de David, y de la
aldea de Belén, de donde era David, ha de venir el Cristo? Hubo entonces disensión entre la gente a causa
de él. Y algunos de ellos querían
prenderle; pero ninguno le echó mano.
¿Eres tú también galileo? Escudriña y ve que de Galilea nunca se ha
levantado profeta
Juan
7:48- 52 ¿Acaso ha
creído en él alguno de los gobernantes, o de los fariseos? Mas esta gente que
no sabe la ley, maldita es. Les dijo Nicodemo, el que vino a él de noche, el
cual era uno de ellos: ¿Juzga acaso nuestra ley a un hombre si primero no le
oye, y sabe lo que ha hecho? Respondieron y le dijeron: ¿Eres tú también
galileo? Escudriña y ve que de Galilea nunca se ha levantado profeta.
¿Qué dices tú del que te abrió los ojos? Y él dijo: Que es profeta.
Juan 9:16, 17 Entonces algunos de los fariseos decían: Ese
hombre no procede de Dios, porque no guarda el día de reposo. Otros decían:
¿Cómo puede un hombre pecador hacer estas señales? Y había disensión entre
ellos. Entonces volvieron a decirle al
ciego: ¿Qué dices tú del que te abrió los ojos? Y él dijo: Que es profeta.
Esto no lo dijo por sí mismo, sino que como era el sumo sacerdote
aquel año, profetizó que Jesús había de morir por la nación
Juan
11:49- 53 Entonces
Caifás, uno de ellos, sumo sacerdote aquel año, les dijo: Vosotros no sabéis
nada; ni pensáis que nos conviene que un
hombre muera por el pueblo, y no que toda la nación perezca. Esto no lo dijo por sí mismo, sino que como
era el sumo sacerdote aquel año, profetizó que Jesús había de morir por la
nación; y no solamente por la nación,
sino también para congregar en uno a los hijos de Dios que estaban dispersos. Así que, desde aquel día acordaron matarle.
Hallaron a cierto mago, falso
profeta, judío, llamado Barjesús
Hechos
13:6 Y habiendo atravesado toda la isla hasta
Pafos, hallaron a cierto mago, falso profeta, judío, llamado Barjesús,
Hechos
13:40 Mirad,
pues, que no venga sobre vosotros lo que está dicho en los profetas:
Como ellos también eran
profetas
Hechos
15:30 Así, pues, los que fueron enviados
descendieron a Antioquía, y reuniendo a la congregación, entregaron la carta; habiendo leído la cual, se regocijaron por la
consolación. Y Judas y Silas, como ellos
también eran profetas, consolaron y confirmaron a los hermanos con abundancia
de palabras.
Vino
sobre ellos el Espíritu Santo; y hablaban en lenguas, y profetizaban
Hechos
19:6, 7 Y habiéndoles impuesto Pablo las manos, vino
sobre ellos el Espíritu Santo; y hablaban en lenguas, y profetizaban. Eran por todos unos doce hombres.
Descendió de Judea un profeta llamado Agabo
Hechos
21:8- 11 Al otro día, saliendo Pablo y los que con él
estábamos, fuimos a Cesarea; y entrando en casa de Felipe el evangelista, que
era uno de los siete, posamos con él. Este tenía cuatro hijas doncellas que
profetizaban. Y permaneciendo nosotros allí algunos días, descendió de Judea un
profeta llamado Agabo, quien viniendo a
vernos, tomó el cinto de Pablo, y atándose los pies y las manos, dijo: Esto
dice el Espíritu Santo: Así atarán los judíos en Jerusalén al varón de quien es
este cinto, y le entregarán en manos de los gentiles.
De manera que, teniendo diferentes dones, según la gracia que nos es
dada, si el de profecía, úsese conforme a la medida de la fe
Romanos
12:5- 21 así
nosotros, siendo muchos, somos un cuerpo en Cristo, y todos miembros los unos
de los otros. De manera que, teniendo
diferentes dones, según la gracia que nos es dada, si el de profecía, úsese
conforme a la medida de la fe; o si de
servicio, en servir; o el que enseña, en la enseñanza; el que exhorta, en la
exhortación; el que reparte, con liberalidad; el que preside, con solicitud; el
que hace misericordia, con alegría. El amor sea sin fingimiento. Aborreced lo malo,
seguid lo bueno. Amaos los unos a los otros con amor fraternal; en cuanto a
honra, prefiriéndoos los unos a los otros. En lo que requiere diligencia, no
perezosos; fervientes en espíritu, sirviendo al Señor; gozosos en la esperanza;
sufridos en la tribulación; constantes en la oración; compartiendo para las
necesidades de los santos; practicando la hospitalidad. Bendecid a los que os
persiguen; bendecid, y no maldigáis. Gozaos con los que se gozan; llorad con
los que lloran. Unánimes entre vosotros; no altivos, sino asociándoos con los
humildes. No seáis sabios en vuestra propia opinión. No paguéis a nadie mal por
mal; procurad lo bueno delante de todos los hombres. Si es posible, en cuanto dependa de vosotros,
estad en paz con todos los hombres. No os venguéis vosotros mismos, amados
míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la
venganza, yo pagaré, dice el Señor. Así
que, si tu enemigo tuviere hambre, dale de comer; si tuviere sed, dale de
beber; pues haciendo esto, ascuas de fuego amontonarás sobre su cabeza. No seas vencido de lo malo, sino vence con el
bien el mal.
Pero toda mujer que ora o profetiza con la cabeza descubierta,
afrenta su cabeza
1
Corintios 11:5- 7
Pero toda mujer que ora o profetiza con la cabeza descubierta, afrenta
su cabeza; porque lo mismo es que si se hubiese rapado. Porque si la mujer no se cubre, que se corte
también el cabello; y si le es vergonzoso a la mujer cortarse el cabello o
raparse, que se cubra. Porque el varón
no debe cubrirse la cabeza, pues él es imagen y gloria de Dios; pero la mujer
es gloria del varón.
A otro, el hacer milagros; a otro, profecía
1
Corintios 12:7- 11
Pero a cada uno le es dada la manifestación del Espíritu para provecho. Porque
a éste es dada por el Espíritu palabra de sabiduría; a otro, palabra de ciencia
según el mismo Espíritu; a otro, fe por
el mismo Espíritu; y a otro, dones de sanidades por el mismo Espíritu. A otro, el hacer milagros; a otro, profecía; a
otro, discernimiento de espíritus; a otro, diversos géneros de lenguas; y a
otro, interpretación de lenguas. Pero todas estas cosas las hace uno y el mismo
Espíritu, repartiendo a cada uno en particular como él quiere.
Y a unos puso Dios en la iglesia, primeramente apóstoles, luego
profetas, lo tercero maestros, luego los que hacen milagros, después los que
sanan, los que ayudan, los que administran, los que tienen don de lenguas
1
Corintios 12:27- 30
Vosotros, pues, sois el cuerpo de Cristo, y miembros cada uno en
particular. Y a unos puso Dios en la iglesia, primeramente apóstoles, luego
profetas, lo tercero maestros, luego los que hacen milagros, después los que
sanan, los que ayudan, los que administran, los que tienen don de lenguas. ¿Son todos apóstoles? ¿Son todos profetas? ¿Todos
maestros? ¿Hacen todos milagros? ¿Tienen
todos dones de sanidad? ¿Hablan todos lenguas? ¿Interpretan todos?
Y si tuviese profecía, y entendiese todos los misterios y toda
ciencia
1 Corintios 13:1, 2 Si yo hablase lenguas humanas y
angélicas, y no tengo amor, vengo a ser como metal que resuena, o címbalo que
retiñe. Y si tuviese profecía, y entendiese todos los misterios y toda ciencia,
y si tuviese toda la fe, de tal manera que trasladase los montes, y no tengo
amor, nada soy.
Pero las profecías se
acabarán, y cesarán las lenguas, y la ciencia acabará.
1
Corintios 13:8, 9
El amor nunca deja de ser; pero las profecías se acabarán, y cesarán las
lenguas, y la ciencia acabará. Porque en parte conocemos, y en parte
profetizamos; mas cuando venga lo
perfecto, entonces lo que es en parte se acabará.
Procurad profetizar, y no
impidáis el hablar lenguas
1 Corintios 14:1- 40
Seguid el amor; y procurad los dones espirituales, pero sobre todo que
profeticéis Porque el que habla en
lenguas no habla a los hombres, sino a Dios; pues nadie le entiende, aunque por
el Espíritu habla misterios. Pero el que
profetiza habla a los hombres para edificación, exhortación y consolación. El
que habla en lengua extraña, a sí mismo se edifica; pero el que profetiza,
edifica a la iglesia. Así que, quisiera que todos vosotros hablaseis en
lenguas, pero más que profetizaseis; porque mayor es el que profetiza que el
que habla en lenguas, a no ser que las interprete para que la iglesia reciba
edificación. Ahora pues, hermanos, si yo voy a vosotros hablando en lenguas,
¿qué os aprovechará, si no os hablare con revelación, o con ciencia, o con
profecía, o con doctrina? Ciertamente
las cosas inanimadas que producen sonidos, como la flauta o la cítara, si no
dieren distinción de voces, ¿cómo se sabrá lo que se toca con la flauta o con
la cítara? Y si la trompeta diere sonido
incierto, ¿quién se preparará para la batalla? Así también vosotros, si por la lengua no
diereis palabra bien comprensible, ¿cómo se entenderá lo que decís? Porque
hablaréis al aire. Tantas clases de idiomas hay, seguramente, en el mundo, y
ninguno de ellos carece de significado. Pero si yo ignoro el valor de las
palabras, seré como extranjero para el que habla, y el que habla será como
extranjero para mí. Así también vosotros; pues que anheláis dones espirituales,
procurad abundar en ellos para edificación de la iglesia. Por lo cual, el que
habla en lengua extraña, pida en oración poder interpretarla. Porque si yo oro en lengua desconocida, mi
espíritu ora, pero mi entendimiento queda sin fruto. ¿Qué, pues? Oraré con el
espíritu, pero oraré también con el entendimiento; cantaré con el espíritu,
pero cantaré también con el entendimiento. Porque si bendices sólo con el
espíritu, el que ocupa lugar de simple oyente, ¿cómo dirá el Amén a tu acción
de gracias? pues no sabe lo que has dicho. Porque tú, a la verdad, bien das
gracias; pero el otro no es edificado. Doy gracias a Dios que hablo en lenguas
más que todos vosotros; pero en la iglesia prefiero hablar cinco palabras con
mi entendimiento, para enseñar también a otros, que diez mil palabras en lengua
desconocida. Hermanos, no seáis niños en el modo de pensar, sino sed niños en
la malicia, pero maduros en el modo de pensar. En la ley está escrito: En otras
lenguas y con otros labios hablaré a este pueblo; y ni aun así me oirán, dice
el Señor. Así que, las lenguas son por señal, no a los creyentes, sino a los
incrédulos; pero la profecía, no a los incrédulos, sino a los creyentes. Si, pues, toda la iglesia se reúne en un solo
lugar, y todos hablan en lenguas, y entran indoctos o incrédulos, ¿no dirán que
estáis locos? Pero si todos profetizan, y entra algún incrédulo o indocto, por
todos es convencido, por todos es juzgado; lo oculto de su corazón se hace
manifiesto; y así, postrándose sobre el rostro, adorará a Dios, declarando que
verdaderamente Dios está entre vosotros. ¿Qué hay, pues, hermanos? Cuando os
reunís, cada uno de vosotros tiene salmo, tiene doctrina, tiene lengua, tiene
revelación, tiene interpretación. Hágase todo para edificación. Si habla alguno
en lengua extraña, sea esto por dos, o a lo más tres, y por turno; y uno
interprete. Y si no hay intérprete, calle en la iglesia, y hable para sí mismo
y para Dios. Asimismo, los profetas
hablen dos o tres, y los demás juzguen. Y si algo le fuere revelado a otro que
estuviere sentado, calle el primero. Porque podéis profetizar todos uno por
uno, para que todos aprendan, y todos sean exhortados. Y los espíritus de los
profetas están sujetos a los profetas; pues Dios no es Dios de confusión, sino de
paz. Como en todas las iglesias de los santos, vuestras mujeres callen en las
congregaciones; porque no les es permitido hablar, sino que estén sujetas, como
también la ley lo dice. Y si quieren aprender algo, pregunten en casa a sus
maridos; porque es indecoroso que una mujer hable en la congregación. ¿Acaso ha
salido de vosotros la palabra de Dios, o sólo a vosotros ha llegado? Si alguno
se cree profeta, o espiritual, reconozca que lo que os escribo son mandamientos
del Señor. Mas el que ignora, ignore. Así
que, hermanos, procurad profetizar, y no impidáis el hablar lenguas; pero hágase todo decentemente y con orden.
Como ahora es revelado a sus
santos apóstoles y profetas por el Espíritu
Efesios
3:5 misterio que en otras generaciones no se dio
a conocer a los hijos de los hombres, como ahora es revelado a sus santos
apóstoles y profetas por el Espíritu:
Efesios
4:11, 12 Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a
otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la
obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo,
No menospreciéis las profecías
1
Tesalonicenses 5:15
Mirad que ninguno pague a otro mal por mal; antes seguid siempre lo
bueno unos para con otros, y para con todos. Estad siempre gozosos. Orad sin
cesar. Dad gracias en todo, porque esta
es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús. No apaguéis al Espíritu. No menospreciéis las profecías. Examinadlo
todo; retened lo bueno. Absteneos de toda especie de mal.
Timoteo, te encargo, para que conforme a las profecías que se
hicieron antes en cuanto a ti, milites por ellas la buena milicia
1
Timoteo 1:18- 20
Este mandamiento, hijo Timoteo, te encargo, para que conforme a las
profecías que se hicieron antes en cuanto a ti, milites por ellas la buena
milicia, manteniendo la fe y buena
conciencia, desechando la cual naufragaron en cuanto a la fe algunos, de los cuales son Himeneo y Alejandro, a
quienes entregué a Satanás para que aprendan a no blasfemar.
No descuides el don que hay en ti, que te fue dado mediante profecía
con la imposición de las manos del presbiterio
1
Timoteo 4:14- 16
No descuides el don que hay en ti, que te fue dado mediante profecía con
la imposición de las manos del presbiterio. Ocúpate en estas cosas; permanece en ellas,
para que tu aprovechamiento sea manifiesto a todos. Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina;
persiste en ello, pues haciendo esto, te salvarás a ti mismo y a los que te
oyeren.
Uno de ellos, su propio profeta, dijo: Los cretenses, siempre
mentirosos, malas bestias, glotones ociosos
Tito
1:12, 13 Uno de
ellos, su propio profeta, dijo: Los cretenses, siempre mentirosos, malas bestias,
glotones ociosos. Este testimonio es
verdadero; por tanto, repréndelos duramente, para que sean sanos en la fe,
Entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de
interpretación privada, porque nunca la
profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios
hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo
2
Pedro 1:19- 21
Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien
en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el
día esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones; entendiendo primero esto, que ninguna profecía
de la Escritura es de interpretación privada, porque nunca la profecía fue traída por
voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados
por el Espíritu Santo.
Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son
de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo. En esto conoced
el Espíritu de Dios: Todo espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en
carne, es de Dios
1 Juan 4:1 Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad
los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el
mundo. En esto conoced el Espíritu de Dios: Todo espíritu que confiesa que
Jesucristo ha venido en carne, es de Dios; y todo espíritu que no confiesa que Jesucristo
ha venido en carne, no es de Dios; y este es el espíritu del anticristo, el
cual vosotros habéis oído que viene, y que ahora ya está en el mundo. Hijitos,
vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque mayor es el que está en
vosotros, que el que está en el mundo. Ellos son del mundo; por eso hablan del mundo,
y el mundo los oye. Nosotros somos de Dios; el que conoce a Dios, nos oye; el
que no es de Dios, no nos oye. En esto conocemos el espíritu de verdad y el
espíritu de error.
El simple todo lo cree
Proverbios 14:15 El simple todo lo cree; Mas el avisado mira bien sus pasos.
Los profetas profetizaron
mentira, y los sacerdotes dirigían por manos de ellos; y mi pueblo así lo quiso
Jeremías 5:31 los profetas profetizaron mentira, y los
sacerdotes dirigían por manos de ellos; y mi pueblo así lo quiso. ¿Qué, pues,
haréis cuando llegue el fin?
Guardaos de los falsos profetas
Mateo 7:15 Guardaos de los falsos profetas, que vienen a
vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces.
Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y a
muchos engañarán
Mateo 24:4, 5 Respondiendo Jesús, les dijo: Mirad que nadie
os engañe. Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y a
muchos engañarán.
Mas os ruego, hermanos, que os fijéis en los que causan divisiones y
tropiezos en contra de la doctrina que vosotros habéis aprendido, y que os
apartéis de ellos. Porque tales personas
no sirven a nuestro Señor Jesucristo, sino a sus propios vientres
Romanos
16:17, 18 Mas os
ruego, hermanos, que os fijéis en los que causan divisiones y tropiezos en contra
de la doctrina que vosotros habéis aprendido, y que os apartéis de ellos. Porque tales personas no sirven a nuestro
Señor Jesucristo, sino a sus propios vientres, y con suaves palabras y lisonjas
engañan los corazones de los ingenuos.
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